La iglesia de Santa Anna de Barcelona abrió sus puertas para acoger a las personas sin hogar y a sus perros.
La iniciativa ha nacido para proteger a los sin techo y a sus perros frente a la previsión de la ola de frío y, debido a la grand demanda, la parroquia ha decido prorrogar la iniciativa a todo el invierno. Muchos sin techo no quieren ir a dormir en los albergues municipales porque no se permiten animales y ellos no quieren dejar a sus mascotas solas.
En la iglesia, los humanos y los perritos sin hogar pueden dormir, reciben comida y cuentan con un servicio veterinario gratuito para los perros.
Si eres de Barcelona y quieres ayudar, puedes llevar pan, leche, mantas, esterillas y cosas útiles.
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